lunes, 6 de julio de 2009

Sentido común

Sí, esa extraña especie en peligro de extincion por lo que parece. Y no, por esta vez no me voy a poner a lamentarme de cómo el ser humano está perdiendo esta facultad mental y todo parece cada vez más ridículo a nuestro alrededor. No, hoy no van por ahí los tiros. Ups, se me ha escapado.

Todo viene a raíz de un mail del trabajo el otro día sobre cuestiones terminológicas. Yo presenté unas opciones y a la hora de validarlas tuve que explicarle a un extranjero por qué de que X sea mejor que Y. Fue entonces cuando lo descubrí. Es imposible explicar coherente algo que puramente se basa en el sentido común y el instinto traductológico. Porque sí, defiendo que es un insinto, o al menos tan instinto coo el lenguaje.

Como hablante de una lengua el conocimiento está almacenado en tu cabeza y su totalidad permanece como una enorme base de datos en estado pasivo. De esa inmensa y enorme base de datos se extraen consecuencias, de cuyo proceso muchas veces ni siquiera eres consciente. Tu mente ha ligado relaciones, causas, efectos, estadísticas, connotaciones, denotaciones y te da un resultado que ni siquiera has tenido que pensar.

Ahora bien, alguien te hace la pregunta de "¿de dónde viene tu resultado Z?" Y tú te vienes abajo, porque al ser tan de "sentido común" para ti, has pasado por alto todo el proceso subconsciente que te ha llevado a él. Y quedas como una idiota con los dedos pausados en el teclado intentando pillar el hilo de esa línea de pensamientos que no has tenido.

No soy lingüista y probablemente Chomsky se tirara de los pelos si lo leyera, pero por fortuna no lo hará y yo prefiero basarme en lo que intuyo de mi experiencia y no en lo que otros dicen haber descubierto. Sentido común... Sentido común. Señor, qué frustración.

P.D. Si hay algún fan de Sherlock Holmes por ahí, puede que esto le suene a algunas cosas que dijo a Watson el buen señor de los ojos grises. *Sigh*

sábado, 4 de julio de 2009

Meteoros

Météore ya está en casita conmigo. De hecho, estoy escribiendo con él desde el balcón. Al final me olvidé de la miniatura de 10 pulgadas en la que no me cabían los dedos y me he comprado un aparatito de 11,6. Es más grande, pero todavía ligero. Y puede que el procesador sea un Atom, eso por lo que el señorito Drizzt estaría dispuesto a raparse, pero tampoco lo necesito para mucho más que para escribir aquí, escuchar música y abrir el word. Así que tampoco voy a ir a por una maquina más potente.

Lo único que le pido a este monstruito es que me regale más momentos como éste. En cafeterías o aquí mismo en el balcón, para escribir y escuchar el tecleado de mis palabras con la música de fondo.

No sé si ya he contado por qué he querido llamarlo Météore. Aquí la friki, que sigue escuchando como una histérica La república de los meteoros de Indochine. Hace tiempo dije que quería que mi vida fuera como un meteoro, y sí, lo sigo manteniendo. Así que he pensado al respecto.

Últimamente ya no subo fotos, pero mi madre me ha hecho un vestido nuevo. Es con corte años cincuenta, por debajo de la rodilla. Está hecho con una tela brillante de color negro y tiene unas flores de color rojo intenso bien hermosas dibujadas. Allá adonde voy se me ve, como diría mi padre. Y me gusta mirar hacia abajo cuando lo llevo puesto. Veo como la tela brillante se va moviendo con cada paso y entonces me imagino que soy un meteoro por los pasillos del metro.

Visto de negro, cierto, pero me gustan los colores brillantes. El negro inmaculado, el blanco nuclear, el violeta perfecto, el rojo intenso, el azul eléctrico. Cuando miro alrededor y veo a la gente, sus colores son desvaídos. Estaán apagados, decolorados, nadie se pondría colores que parecen pintados con rotuladores. Y yo los llevo hasta en la cara cuando puedo. Labios muy rojos, cara muy blanca, coloretes rosados y sombra de ojos como el violeta de un CD bajo el fluorescente de la cocina. Tengo zapatos de charol también. Y ahora sólo me falta teñirme el pelo negro para ser un meteoro de intensos colores por el laberinto del subsuelo barcelnés. Me mola la idea. Me doy cuenta de que es así como quiero cruzarme con la gente y pasar por la vida en un momento. Aunque se acabe pronto.

Debo de ser muy tonta. Y no, no por lo del Atom, Drizzt. XD

miércoles, 1 de julio de 2009

Sabiduría

Hay quien dice que la sabiduría viene con la edad y la experiencia. Puede ser, pero no termino de estar de acuerdo. Yo creo que depende más bien del miedo que nos tengamos o nos dejemos de tener.

Pronto tendré más tiempo y podré contar la hazaña del lomo empanado. Mwa, ja, ja.

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