viernes, 5 de enero de 2007

Vuelvo a estar desfasada, y es que nunca se me habría ocurrido ponerme a hablar del libro ni de la película por lo malos que me parecen ambos. Pero mira por donde, ayer la alquilé porque mi madre no la tenía vista y dije: "Ale, pues yo también la veo".

Y... bueno... sí... en fin. Primero y ante todo... sigue habiendo gente maravilla y embelesada por la trama de la historia. ¿Cómo es posible que Dan Brown investigara y descubriera una historia semejante? Pues muy fácil. Leyendo cualquier libro de catarismo. El maravilloso descubrimiento que ha hecho que todo el mundo se lleve las manos a la cabeza, llevaba constando en libros desde al menos la edad media y son varias las colecciones de libros modernos (véase en Círculo de Lectores) que hablan exactamente de lo mismo, pero con rigor histórico.

Y literariamente hablando pues... el lenguaje y sintaxis que usa el original es para niños angloparlantes de 15 años como mucho. De literatura no tiene nada, es ya un guión orientado a la gran pantalla.

Que esa es otra... la estuve viendo ayer con subtítulos y a la vez doblada en castellano y por Dios esas traducciones!!!! La línea de la rosa pasó a ser la línea rosa, el siglo XIV a ser el siglo XVI, y una y otra vez aparecía una cierta "llave de bóveda" como para referirse a una "piedra angular". Y eso por no comentar la antinaturaleza de la manera de hablar y como en ocasiones iba a trompicones. Por supuesto esto no lo nota, excepto los desgraciados que llevamos 4 años de carrera de traducción y luego nos llaman tiquismiquis y obsesionados. Defecto de profesión.

Y respecto a la historia en sí... nada nuevo desde el ámbito de los personajes. El héroe al que todo le sale bien, la heroína a la que todo le sale bien, los malos muy malos sin ningún tipo de escrúpulo. Tal vez se salve el profesor obsesionado con su trabajo, que pierde el sentido de la ética y el asesino al que siempre han llamado monstruo y mata precisamente por la única persona que le ha llamado ángel. Poco más.

Novela llena de personajes típicos, con una historia ya mareada hasta la saciedad, previsible hasta el final si es que se sabe algo del tema y que hace como si tuviera un conocimiento mucho superior que el que tiene en simbolismo e historia. Pero con las erratas simbológicas ya me meteré cualquier otro día... Podría haber pasado sin mi odio (XDDDD) y como novela de intriga histórica normalita si no le hubieran dado tanto bombo... pero ese aire de "hemos descubierto el mayor secreto de la humanidad que puede hacer tambalear los cimientos de lo que conocemos"... pues como que no. Anda que no se llevaba ya tiempo sabiéndose eso... y que salga a la corriente general de esta manera...
Ya para el caso podría haber pasado lo mismo con El Ocho de Catherine Neville, pero a diferencia del Código etc. la trama es impresionante.

0 comentarios:

Template by:
Free Blog Templates