domingo, 27 de julio de 2008

Un recuerdo

De tanto pensar, últimamente me cuesta demasiado hablar. Cada vez que vuelvo a casa de mis padres es como tender la mano a los demonios y volver atrás en el tiempo con todo lo que eso implica. A todos nos pasa, supongo... No hacen falta palabras tan grandilocuentes para hablar del tema. Pero en fin... me replanteo la vida y lo que soy más allá de lo razonable y los pensamientos degeneran y degeneran en espirales hasta que me pierdo en ellos y es como si ni siquiera hubiera pensado.

Hace un rato me ha saltado un recuerdo en la cabeza. La única vez en mi vida que he llegado a pensar que soy guapa. Todo aquél que me conozca un poco sabe el pequeño problema que tengo con mi cara... Y por favor, absténgase de comentarios de: "Pero no digas esas cosas", etc. que no funcionan.

Fue en Japón... Con una amiga vietnamita a la que me pasé pegada todo el año, Khue. Chiquitina como ella sola, pequeñita como una muñeca y adorable hasta límites insospechados. Creo que ella se encariñó tanto de mí como yo de ella... Y el último recuerdo que guardo de ella es abrazada a mí y llorando a mares, habiendo adelantado la vuelta de su viaje a Kyoto para despedirse de mí en el aeropuerto de Narita. Y aparte de ese, tengo pocos recuerdos más dolorosos.

Solía venir a mi habitación todas las noches a preguntarme qué había que hacer para el día siguiente o contarme cualquier cosa con la excusa. Y me decía que yo no podía ser occidental, que a ver si en mi país todo el mundo era como yo. Y cuando se iba siempre me acariciaba la mejilla con la mano... Aquí la ignorante pensaba que era cuestión de tradiciones vietnamitas. ¡Yo qué se! Hasta que le pregunté por qué lo hacía y me dijo que cuando veía algo tan increíblemente bonito tenía que tocarlo para ver que era verdad. Y yo que me quedé con carita de O_O.

Poco antes de marcharme, se lo comenté a una amiga italiana y a unas chicas estadounidenses y se echaron a reír. Y me dijeron lo mismo... a lo que respondí que debía de ser el aire de Japón, porque de donde yo era, no era para nada guapa. De la media para abajo. Y entonces me dijeron que hiciera un poco más de magia para que a la vuelta no volviera a ser fea.

Me resulta tan peculiar lo poco que he hablado del año que pasé allí... He perdido el contacto con todo el mundo y es como si se hubieran convertido en otra bandada de ángeles que nunca existieron. Estoy rara. Mi prosa está rara. Mi ensayo está raro. Es la casa de mis padres, que no sé qué tiene.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

La vida es un lugar muy extraño lleno de mundos que son inconexos entre sí.

Más de una vez me ha pasado y, al ser algo completamente fuera del mundo en el que estás "habitualmente", no quieres contaminar el recuerdo con la realidad "cotidiana"... Por lo menos esa es mi razón para hablar poco de determinadas cosas.

Anónimo dijo...

Creo que te tomó por su oneesama ^^UU

Anónimo dijo...

Jo...
Que envidia me da verte con esos recuerdos de los que carezco.

Anónimo dijo...

Es impresionante como el regreso a un lugar donde habita nuestro pasado, es capaz de descubrir, bajo una manta de polvo, los recuerdos más arraigados en nuestro ser.

A veces uno tiene la imperiosa necesidad de vivir, durante un insignificante periodo, en ese mundo conformado de pequeños y buenos momentos.

Anónimo dijo...

La belleza es tan sumamente relativa...
y los patrones establecidos parecen ser tan absurdamente sólidos que ante ello solo puedes plantearte el irte del planeta.

Aiix... espera que ahora viene el momento "rebota rebota y en tu culo explota " XD:
Si te cansas o te has cansado de decirme que mi cara es preciosa... imagínate como debo estar lo yo
XDDDDDDD
cansina tú
cansina yo


Y a raíz de lo que dice Sebastian piensa que cada recuerdo de este tipo es una esmeralda y no amatista (ale a buscar la simbologia de las piedras)wur nos adorna y a este paso mientras tu pareces Salomé yo soy como juan Bautista... XD Vease por el taparabos de piel de cordero y las chanclas frente a tus joyas-recuerdo


un besin en la nuca

Anónimo dijo...

Es por tus grandiosos ojos, tu pelo, tu echura...
Desde fuera deben de estar tan acostumbrados a vernos a través de esos estereotipados caretos norteamericanos que luego tienen que redescubrirnos, igual que nosotros tenemos que redescubrirlos a ellos... e incluso a nosotros mismos.
Siempre pensé que una mujer como tú en oriente las tenía todas para destacar por sí misma. Y creo que te acordarás de que te lo dije. Tienes todo eso de lo que ellos carecen. Yo de espaldas ni siquiera me distingo entre ellos, para bien y para mal...

Un día despertaremos... y el mundo será un poco más bello, y quizás nosotros con él.

Me han entrado ganas de volver a verte ^^ como ahora no puedo hacerlo me conformaré con un buen chute de deviantart.

((¿Tu amiga no tendrá ganas de veranear un año con nosotros? :p))

Anónimo dijo...

Que historia tan bonita!

Aunque discrepo en el punto de la belleza, y es por ello que te lo pondré en mayúsculas y en una sola palabra: GUAPA.

Anónimo dijo...

Te diré una cosa, y como es por escrito me será más fácil decírtela. En cuanto a tu belleza, si bien cuando te conocí no pensé que fueras guapa, con el tiempo te he ido encontrando lo que una vez leí -y me gustó y adopté para mi vocabulario- como "belleza extraña". Creo que tienes eso. Sea como fuere, a mí tu cara me resulta muy agradable, qué quieres que te diga. Y te pareces a María Bárbara, cosa que espero que te guste saber.

Template by:
Free Blog Templates