miércoles, 16 de diciembre de 2009
Stardust es una novela fantástica de Neil Gaiman publicada en 1999. Narra las aventuras y desventuras de un joven en busca de una estrella fugaz caída del cielo y se caracteriza principalmente por su prosodia e ilustraciones al más puro estilo de cuento de hadas.
Debió de ser en mayo cuando me dejaron este libro. Recuerdo haberlo leído en el tren de camino a casa de mis padres para pasar el puente. Estaba en un pico de trabajo y llevaba varios días sin parar un segundo, hasta que me senté en el tren, me puse la música y empecé a leer.
Lo primero que me llamó la atención del libro fue su maquetación, al más puro estilo de los libros de cuentos que leía de pequeña. Hacía demasiado, demasiado tiempo que no cogía uno entre las manos. Ahí estaban las páginas con el volumen de texto cuidadosamente calculado y los dibujos de nítidos contornos y colores definidos. A veces claros, otras veces oscuros y mezclándose a la perfección con el flujo de la historia. ¡Y olía a papel del bueno! De ese que no es grumoso, sino satinado... Lo cual ya me va bien, porque si no se me pone la piel de gallina.
¿Cómo decirlo? Stardust es un cuento. Un cuento para adultos por el tipo de narración, pero con el ritmo y la cadencia de los cuentos clásicos. Una suerte de Princesa Prometida, aunque con una trama muy diferente: la historia de un joven medio humano-medio feérico que parte en busca de una estrella fugaz caída del cielo para regalársela a la chica que le gusta. Para ello tendrá que abandonar su pueblo y el mundo que siempre ha conocido y enfrascarse en una carrera contra reloj en la que competirá con unos avariciosos hermanos y tres brujas que también ansían encontrar la estrella; los primeros para decidir quién reinará y las segundas para recuperar su juventud perdida.
Es increíble lo difícil que es encontrar este tipo de literatura. Soy consciente de que los tiempos cambian, pero siempre deberían quedar resquicios donde perdure la inocencia y nadie se escandalice (porque sí, hoy en día la gente se escandaliza) cuando hablas de seres fantásticos, brujas que recuperan la juventud y unicornios sin buscarle los tres pies al gato. ¡Que es un cuento!
Yo me lo lei metida en la cama con mi madre diciéndome: ¿Quieres un vasito de leche, cariño? Vamos, una vuelta a la infancia... Y anda que no viene bien en la época en la que empiezas a descubrir lo que es la vida real. Más técnicas para huir de ella. Y para no dejar que te carcoma... Yo advierto, lo primero a lo que ataca es a la inocencia.
P.D. Y sí, acabo de darme cuenta de que es cierto. En estos tiempos la gente se escandaliza ante la inocencia. Lo que mola es ser chachi porque pasas de las cosas, ser más listo de los demás y buscarle los tres pies al gato. Si te gustan los cuentos o tienes salidas en plan inocentón, enseguida te apuntan con el dedo. Porque o no molas, o eres tonta. ¡Que son técnicas de supervivencia para procurarte felicidad!
Subscribe to:
Enviar comentarios (Atom)
8 comentarios:
Curiosamente hace un par de meses también hablé del libro por el blog (http://pongaunagujeronegroensuvida.blogspot.com/2009/09/stardust-version-libro.html) y hace año y pico, de la película, la cuál, por cierto, si no has visto es más que recomendable.
No le he leido, la peli es muy buena.
Nena, eres mi diosa!!!!
Yo no lo he leído, pero Neil Gaiman es Neil Gaiman. Léete el estupendo número 13 USA de Sandman. Está en el número 7 de la edición finita de Planeta, y en cuanto a la edición de Norma ni idea de dónde está, pero será por el principio. Me encanta esa historia.
1.- Ay, pues tengo que verla. Cuando tenga tiempo... Un poco más de tiempo. ¡Que estoy luchando por reequilibrar mi vida! A mí me gustó Stardust, pero sigo pensando que no hay otro como La princesa prometida.
2.- ¡Jopé! ¿Todo el mundo ha viso la peli? No estoy segura, pero algo me dice que la peli es una buena película de fantasía en tanto que el libro va más orientado a los amantes de los cuentos de hadas. Hum... Me encantan inventarme cosas sin tener datos contrastados de nada. ¡Mola!
3.- Lo sé, baby. Lo sé... Por eso mismo me vas a hacer un bizcocho enorme aprovechando que estás en casita del Sebas.
4.- ¡Que teodo el mundo me dice que me lea Sandman, que me va a encantar! ¡Pero yo no tengo pasta para los cómics! Y mira que estoy deseando, jo. Aysh... Un día de estos te voy a pedir que me hagas un listado de cómics para leer o algo así. Y pur cierto, les he comprado a mis padres el Zelda de la DS, el del reloj de arena o como se llame. ¡Me voy a catarlo!
Jo, yo tenía el Sandman completo, te lo habría dejado. Pero lo presté y no volvió :(
En compensación, te puedo dejar Fábulas. Son las fábulas de toda la vida (Blancanieves, el Lobo Feroz...), pero que viven en el Nueva York actual. Una pasada, te va a encantar :)
La peli está guay. Yo la vi antes de leer el libro y me encantó. Quizás si la veo después de leer el libro ya no me encante, pero en cualquier caso, merece la pena :)
Jooooooo. Parece que es la serie maldita, nooooo. Alguien más de la secta me la mencionó alguna vez, y luego también mi compi de trabajo... ¡Pero no la consigo por ninguna parte! Creo que es un mensaje de la Reina Araña para que me la compre yo con el sudor de mi frente y los ahorros de mi trabajo. Así que lo haré, jis, jis. Ooooooye, eso de las fábulaaaaaas... Suena bien. Es que el tema de los cuentos urbanos me mola. No sólo como adaptaciones de cuentos tradicionales, sino como una especie de cuentos de hadas pero en ámbito urbano. La ciudad también trae sus pequeñas dosis de magia. O eso quiero creer. ¡Un día fui escoltada por un camión de la basura!
Y cómo te dije en su día, has sido escoltada por cosas peores :)
Publicar un comentario